Queremos lanzarte algunas preguntas:
- ¿Alguna vez te has preguntado acerca de tus creencias?
- ¿Te has cuestionado sobre lo que crees?
- ¿Sobre si eso que crees, es lo que es realmente?
- ¿O sobre si esa creencia no es del todo cierta?
Estas cuestiones no son habituales, aunque hay circunstancias y momentos en nuestras vidas en las que nos llegamos a hacer estos cuestionamientos. Sobre todo, cuando tenemos situaciones de crisis personales, es cuando nos llegamos a replantear muchos de nuestros pensamientos y muchas de nuestras creencias.
Pero hay una forma para poder trabajar y cambiar las creencias.
Si eres una persona curiosa y no quieres esperar a tener una gran crisis en tu vida para reflexionar acerca de lo que crees sigue leyendo.
Una manera de poder cambiar tus creencias es a través del ejercicio de los “reality cheacking” o “chequeos o comprobaciones de la realidad”.
Para poder comprender mejor que es esta técnica y como puedes aplicarla, déjame compartir contigo un ejemplo.
Hasta el siglo XVIII se creía que todos los cisnes eran blancos. Pero concretamente el 1697 ocurrió un hecho que cambio la creencia de miles de personas. En este año los exploradores ingleses que llegaron a Australia descubrieron un ejemplar de cisne negro (Cygnus atraus). Que sorpresa se llevaron al contemplar una ave que siempre habían creído que era blanca. En ese momento tenían enfrente suyo una prueba real de que existían los cisnes negros.
Para poder convencer a sus allegados, se llevaron ejemplares vivos para poder demostrar que no mentían. Al llegar a Inglaterra los incrédulos/as no tuvieron más remedio que aceptar esta nueva verdad.
Y esto es lo mismo que podemos aplicar en nuestro día a día para poder cambiar nuestras creencias. Una manera simple y directa de poder transformar nuestras creencias es buscando y encontrando pruebas que demuestren aquello que sí queremos creer.
O visto des de otra perspectiva, debemos encontrar pruebas, hechos o situaciones que puedan desmontar nuestras antiguas creencias.
Por ejemplo, si tengo la creencia de que no soy bueno cocinando, puedo apuntarme a un curso de cocina y demostrarme a mí mismo/a de que soy capaz de convertirme en un/a buen/a chef.
Si tengo temor a emprender o a montar negocios, puedo empezar haciendo algún proyecto, producto o servicio (por muy sencillo que sea), para demostrarme que soy capaz de empezar un negocio.
Estas pruebas al ser elementos reales y tangibles, harán que inmediatamente amplíes y transformes tus marcos mentales (esos conjuntos de creencias y pensamientos).
Y lo bueno de todo esto, es que podemos cambiar creencias respecto a cualquier ámbito de nuestras vidas. Sólo necesitamos una pequeña prueba de realidad en la dirección y en el ámbito en el que nosotros/as queramos trabajar.
Una prueba llevara a que te animes y quieras obtener más evidencias. Y esto sólo hará que generar lo que se denomina el efecto en cadena o efecto bola de nieve. Es decir, que un resultado llevará a otro resultado.
Pequeños éxitos o resultados, al final equivaldrán a grandes éxitos o grandes resultados.
Y tú, ¿qué quieres creer? ¿Por dónde vas a empezar?