Fomentar la lectura en casa puede tener un papel fundamental en el desarrollo de la habilidad lectora en los niños, que suele iniciarse entre los 6 y los 7 años. Aunque la lectura se enseña en la escuela, los padres pueden contribuir a mejorar ese aprendizaje e incluso a que lo conviertan en su nuevo hobbie, aunque esto último dependerá del carácter y los gustos de
cada niño.
Leer libros en voz alta es una de las mejores maneras de ayudar a que su hijo aprenda a leer.

Estos son algunos consejos que puede seguir cuando lea con su hijo:
● Mientras vaya leyendo resiga con un bolígrafo, un lápiz, el dedo… para que su hijo vea las palabras que están contando la historia.
● Cambie las voces y haga los sonidos propios de los animales, eso le generará interés.
● Muestre a su hijo las imágenes que acompañan el libro y explíquele qué sucede.
● Si hay una frase repetida en el cuento, haga que su hijo participe.
● Si encuentra alguna situación similar a la vida cotidiana hágaselo saber a su hijo.
● Leer libros puede ayudar a que su hijo exprese pensamientos y emociones, así que si su hijo le hace alguna pregunta o quiere hacer algún comentario pare y respóndale.
● Aunque su hijo ya sepa leer, siga leyéndole en voz alta, es una buena manera de que escuche y comprenda historias que no podría comprender leyéndolas por sí mismo. Además, podrán disfrutar de un rato agradable juntos.
● Cada día dedique un tiempo a la lectura, puede ser antes de ir a dormir.
● Procure que la habitación de su hijo sea confortable para la lectura: con una silla o una cama y una lamparita que le facilite ponerse a leer. También deje libros que puedan gustarle a su hijo para que él los lea por su cuenta si le apetece.
● Permítale escoger a su hijo el libro que quiere leer dentro de los apropiados para su edad, de esta forma también generará más interés por la historia si puede elegirla.
● Puede realizar juegos con palabras o elementos que quiera que aprenda para avivar su curiosidad y su interés.

Cuando su hijo se ponga a leer, pídale que lea en voz alta. De esta forma, generará confianza en su forma de leer y disfrutará aprendiendo mientras una persona significativa para él le escucha. Puede turnarse con él para aprender destrezas de lectura de más dificultad.
Es muy importante que si alguna palabra se le atasca, la pronuncie rápido para no perder el hilo de la historia. No haga que su hijo repita la palabra en voz alta si no le apetece.
Si su hijo cambia una palabra pero el significado es el mismo no le haga parar para corregirlo.
Si por el contrario, la palabra no tiene sentido pídale que vuelva a leer la frase diciéndole que no está seguro de haberla comprendido.

No se debe establecer un tiempo de lectura muy largo, ya que si no se cansarán, se frustrarán y no querrán volver a retomarlo. Nunca se olvide de reforzarlo positivamente, eso hará que tenga más ganas de seguir aprendiendo.
Finalmente, hay que tener en cuenta que cada niño es único y tiene su propio ritmo de aprendizaje, por ello es importante no presionar ni forzar. De esta forma disfrutará mucho más del aprendizaje.

Alba Lavandero
Psicóloga General Sanitaria
Colaboradora en OWL INSTITUTE. Institut Psicològic

Fuente: Healthy Children – Cómo ayudarle a su niño a aprender a leer
https://www.healthychildren.org/Spanish/ages-stages/preschool/Paginas/helping-your-child-l
earn-to-read.aspx