Ahora que se acerca la Navidad, nos encontramos inmersos en la atmósfera de un gran número de costumbres y tradiciones, sin olvidar la de los cuentos y las fábulas propias de esta época del año. Uno de los clásicos populares es el relato «Cuento de Navidad» del británico Charles Dickens, quien a través de su novela nos ofrece un magnífico ejercicio de reflexión totalmente adecuada para nuestro crecimiento emocional.
Os propongo hacer un viaje al corazón de la narración desde una visión del Coaching o el arte de hacer preguntas que ayudan a nuestro crecimiento personal.

250px-Charles_Dickens-A_Christmas_Carol-Title_page-First_edition_1843Cuenta la historia, que había un hombre avaro y egoísta llamado Ebenezer Scrooge quien despreciaba la Navidad y todo lo que estaba relacionado con ella. Pero todo cambió cuando la noche del 25 de diciembre recibe tres fantasmagóricas apariciones.

El primer espíritu, es el del Fantasma de las Navidades Pasadas, quien le hace volver la vista a su infancia y juventud y a todo lo que pudo haber sido pero que renunció… me gustaría hacerte las siguientes preguntas: ¿Cómo eras de pequeño y de joven? ¿Qué consideras que sería bueno recuperar de aquellas etapas? Con quien de aquellos tiempos te gustaría retomar el contacto? Que has aprendido de las decisiones del pasado?

El segundo espíritu, es el del Fantasma de las Navidades Presentes, quien muestra a Scrooge diferentes escenas de personas de todo tipo y como disfrutan de la festividad.
¿Te atreves a plantearte algunas cuestiones sobre tu situación actual?: ¿Estás satisfecho/a con tu situación actual? ¿Qué te gustaría que mejorara? ¿Qué puedes hacer para cambiarlo? ¿Hay alguien a quien podrías ayudar hoy?

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Finalmente, llega el Fantasma de las Navidades Futuras, una figura siniestra que no habla y que sólo se limita a señalar a Scrooge las cosas que sucederán el próximo año. La que más le impacta es su muerte y como la vive la gente de su entorno.
Veamos algunos interrogantes para reflexionar: ¿Cómo quieres que fuera tu futuro dentro de un año? Como querrías que fuera el futuro de tus seres queridos? ¿Cómo te gustaría que la gente te recordara? Qué puedes hacer que esté en tus manos?

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En ese momento, el protagonista del cuento despierta en su habitación, descubriendo que es la mañana de Navidad y que todo lo que ha vivido con los espíritus ha durado sólo una noche. Es entonces cuando decide hacer un cambio de 180 grados y se convierte en una mejor persona en todos los sentidos.as

En nuestro caso no hace falta vivir tales visiones fantasmagóricas, a veces sólo necesitamos unos minutos para reflexionar sobre nuestro pasado, nuestro presente y nuestro futuro. Preguntas como las que planteamos, para ayudarte a ser más feliz. Pero no sólo durante la Navidad, mi deseo es que lo seas lo largo de los años.

¡Felices fiestas!