¿A qué le temes? ¿Qué es lo que realmente te da miedo? ¿Qué situaciones te hacen temblar sólo de pensar en ellas?

El miedo es un sentimiento que nos paraliza, nos vence antes de intentar de hacer las cosas y nos convierte en espectadores / as de nuestras vidas.

En primer lugar, debemos comprender que el miedo, así como todas las emociones, tiene una función muy específica: protegernos y mantenernos a salvo. Si no tuviéramos miedo, seríamos capaces de cruzar la calle sin mirar o de subir a la azotea arriesgando nuestras vidas. Pero cuando tenemos un exceso de miedo, nuestras actividades se limitan. Dejemos de hacer todo lo que quisiéramos hacer por culpa de los famosos «y si …». Estas previsiones catastróficas de futuro son los grandes fantasmas que generamos en nuestras mentes.

Entonces la solución es encontrar un punto intermedio: no es sano no tener ningún tipo de miedo, pero una existencia con un exceso de temor tampoco es vida.

¿Pero cómo podemos transformar nuestros miedos?

El miedo en sí existe en base a todo lo que creamos y nos decimos a nivel mental. Hay situaciones que son obvias y que el miedo es totalmente natural. Por ejemplo, si tenemos ante nosotros/as una fiera o nos encontramos en el filo de un precipicio, es totalmente adaptativo que sentimos esta emoción. Pero en un gran número de situaciones somos nosotros mismos/as quiénes exageramos las circunstancias. Nos imaginamos los peores escenarios y de alguna manera los vivimos en nuestro cuerpo.

A continuación, te planteo una alternativa: deja de pensar en lo que te da miedo como una limitación o algo a evitar, prueba de pensar como si se tratara de una aventura o de un experimento interesante. Si temes por ejemplo hablar en público, viajar solo/a o establecer nuevas relaciones, prueba de empezar a pensar en estos nuevos marcos mentales. Todo puede ser una aventura o una situación para experimentar y extraer aprendizajes.

Si lo vives como una aventura o como un experimento empezarás a proyectar emociones de curiosidad, intriga, entusiasmo, alegría y diversión… Esto permitirá que transformes tus estados emocionales. Y finalmente sentirás como tu cuerpo ya no se conecta con las mismas sensaciones.

Si te autoconvences que lo que vivirás será algo para aprender, para divertirse o para explorar, será inevitable que la emoción de miedo deje de tener la misma intensidad.

Quizás necesitarás hacer algunos pasos para poder acercarte a este nuevo marco mental, pero seguro que poco a poco lo conseguirás.

También en los casos muy extremos de fobias o miedos más intensos puede ser positivo contar con el acompañamiento y ayuda de un experto/a. Pero muchas veces descuidamos que en nuestro interior disponemos de un gran abanico de recursos, capacidades y destrezas.

Y a veces somos más nosotros mismos/as que nos auto limitamos y nos convencemos de que no seremos capaces.

¡Tú puedes superar tus miedos!

 

 

 

 

Oriol Lugo

Psicólogo y Coach

Experto en Terapoias Neurocientíficas

Co-director de OWL INSTITUTE. Institut Psicològic